De la tranquilidad del ánimo

Séneca

Presentación

El ensayo De la tranquilidad del ánimo, del filósofo romano Séneca, cae como anillo al dedo ante un panorama, como el actual, en el que cotidianamente tenemos que enfrentar adversidades que nos generan una intranquilidad casi perpetua. Intranquilidad ante nuestro entorno, nuestra comunidad, incluso, y lo que es peor, con nosotros mismos.

Andamos intranquilos porque la confianza en nuestro presente y nuestro futuro es nula, porque perdimos la confianza en nosotros mismos, en nuestras posibilidades, en nuestros semejantes, en nuestros actos.

Sintiéndonos extraviados, no podemos encontrar una brújula que nos indique un camino para salir de ese estado de ánimo que nos asfixia.

Y desesperados, carentes de toda esperanza, deambulamos como idiotizados buscando en otros lo que tan sólo podremos encontrar en nosotros mismos; copiando actitudes y robando caminos ajenos que en vez de conducirnos al reposo sereno, nos transportan a caminos dantescos plagados de pesadillas y horrores sin fin.

Recuperar la confianza en nuestros propios actos, en nuestros propios pasos, en nuestras propias decisiones es, en opinión del filósofo romano, la única alternativa posible para recuperar la tranquilidad.

Revalorarnos y justipreciar nuestro propio ser, elevar el alicaido concepto que de nosotros y de nuestro medio inmediato tengamos, constituye el antídoto contra la perpetua intranquilidad.

Aprender a apreciarnos y a valorar con quienes cotidianamente tratamos, en pocas palabras: a amarnos y a través del amor que hacia nosotros sintamos, irradiar amor a quienes nos rodean y, paralelamente, cultivar la capacidad de captar el amor que de ellos provenga, nos conducirá a estabilizar nuestra autoestima en el punto correcto, colocándonos en nuestro propio y soberano camino de tranquilidad, de serenidad y de aceptación de lo que somos y de lo que podemos. Porque en gran medida, la intranquilidad deviene del rechazo que por nosotros mismos sentimos, de lo que se desprende que el aliviane de nuestra intranquilidad está íntimamente relacionado con el valor que a nosotros mismos nos otorguemos.

Así, el bregar por sobreponernos a las adversidades, el hacer oidos sordos a las permanentes y pérfidas campañas mediáticas promotoras del desaliento, confiando no sólo en nosotros, sino tambien en quienes con nosotros comparten nuestros segundos, minutos, horas, días, semanas, meses y años, puede resultarnos, a la larga, en algo sumamente beneficioso, cuyos efectos se plasmaran en nuestra cotidianidad.

Este ensayo De la tranquilidad del ánimo, puede ofrecer alternativas de superación personal a quien se sumerja en su lectura.

Chantal López y Omar Cortés