ENTREVISTA
AL GENERAL AMADOR ACEVEDO

Píndaro Urióstegui Miranda

EL PLAN DE AYALA.
HABÍA QUE RECUPERAR LAS TIERRAS PARA LOS PUEBLOS

PREGUNTA
El Plan de Ayala se promulgó en noviembre de 1911. Entonces durante los meses de junio a octubre ¿a qué se dedicó Zapata?

RESPUESTA
Exclusivamente a juntar su gente para reorganizar su ejército y a dar nombramientos.

PREGUNTA
¿Es cuando llega Otilio Montaño?

RESPUESTA
Otilio Montaño no se junta todavía; él llegó cuando ya se había declarado el Plan de Ayala.

PREGUNTA
En el Plan de Ayala, promulgado el 28 de noviembre de 1911, Zapata define un ideal agrario; ¿este ideal ya se había venido incubando en Zapata desde antes?

RESPUESTA
Sí señor, desde antes, la cosa de recuperar las tierras para los pueblos y todo eso, era el instinto del odio que se había creado en los pueblos de Morelos contra los hacendados, esa era una idea muy propia de Zapata, nadie se la llevó, él la sintió porque la había vivido y además vio la extorsión que había en esos pueblos.

PREGUNTA
¿Cómo surgió el Plan de Ayala?

RESPUESTA
Mire usted, dicen, pero sin comprobar, que Otilio Montaño fue el que hizo el Plan de Ayala. Yo fui amigo íntimo del general Maurilio Mejía, sobrino carnal de Zapata que fue mucho tiempo jefe de su Estado Mayor, por lo que le tenía gran confianza -era hijo de una hermana-; hasta después de la muerte de Zapata se indultó en Cuautla, donde me encontraba como jefe de la guarnición y tuvimos muchas conversaciones.

Entonces me platicó cosas que habían surgido durante mi ausencia. Me aseguró que durante los meses de octubre y noviembre, Zapata se enfermó de fiebre intestinal, por lo que se interna entre Ayochistla, pequeño pobladito del Estado de Puebla -en donde se firmó el Plan de Ayala- y Santa Mónica del Río, por allá en una cañada se fue a meter Emiliano.

Este Maurilio lo cuidaba con su escolta, lo custodiaba dándole medicinas y víveres.

Platicando del Plan de Ayala me dijo: mira, el Plan de Ayala vino de Guerrero, no lo hizo el profesor Otilio Montaño, lo trajo un señor Ramón Vicario de Quetzalapa; este señor era de instinto revolucionario pero no se fue a las armas, vino a ponerlo en manos de Zapata, pero al no encontrar a nadie me lo dio a mí y yo se lo entregué a Emiliano Zapata, quien después de verlo, lo mandó a su compadre Otilio Montaño.

El documento iba oculto en el interior de un carrizo; cuando lo sacó Maurilio, Zapata le dijo que se lo leyera, gustándole de sobremanera; se entusiasmó mucho con ese documento, por eso lo envió a Otilio, a quien le tenía mucha confianza.

Salustio Carrasco de Iguala, Felipe Avila de Tepecoacuilco y Félix Fuentes de Huitzuco, fueron los tres que redactaron el Plan de Ayala, lo hicieron en Guerrero y fue la causa de que Ambrosio Figueroa fusilara a Salustio Carrasco en Iguala, éste se había hecho su enemigo aunque era maderista.

Otilio sólo le quitó algunas cosas que no le gustaron.

Le aclaro que la denominación de Ejército Libertador del Sur ya venía en el Plan, por eso después fue adoptado por las fuerzas zapatistas.

PREGUNTA
¿ Cómo llegó Otilio Montaño, cómo se incorporó con Zapata, o ya se conocían desde antes?

RESPUESTA
¡Vaya que si se conocían, si eran del mismo pueblo y además compadres!

Mire usted, Otilio se incorporó hasta mucho después, era un profesor ya viejo, alto, trigueño, grueso, muy inteligente y serio; así lo consideré.

Cuando Zapata recibe el Plan, Otilio se encontraba en Tlaltizapán adonde se lo enviaron. Entonces tuvo que irse porque lo buscaba el gobierno creyendo que él lo había redactado.

Después de que sanó Emiliano Zapata mandó llamar a los que pudieron ir a ese pueblo de Ayochistla que fue donde se firmó el Plan de Ayala, en donde hasta la fecha se conserva lá mesita que se utilizó para firmar este documento, la que es cuidada por los indios de ese lugar.

Ahí se dio a la publicidad y empezó a correr el Plan y los rumores de que lo había hecho Montaño, quien tuvo que irse a los cerros porque si lo agarra el gobierno, lo cuelga.