Así, varias de las argumentaciones de Daniel Guérin en este ensayo, se revelan improcedentes, como la reiteradamente mencionada autogestión, la heróica Yugoslavia del mariscal Tito que terminaría desapareciendo, el experimento autogestivo argelino que tanto revuelo y esperanzas levantará en la década de 1960, se interrumpiría envuelto en una compleja situación de política interna. Los héroes de la revuelta estudiantil del mayo francés, particularmente Dany le rouge, l'enfant terrible, de quien Guérin habla maravillas, abandonaría su efervescencia revolucionaria contestataria desarrollando una carrera muy política. En la actualidad, el líder estudiantil que arengaba a las masas, parlotea como antaño, pero ahora sus discursos apoyan abiertamente guerras intervencionistas imperiales, camufleadas bajo la máscara de actos libertadores de supuestas dictaduras norafricanas... ¡Quien hubiera podido imaginar tal cambio en esos años de contestación! En pocas palabras, los ejemplos esperanzadores escogidos por Daniel Guérin se hicieron añicos.

En 1984, la población mexicana soportaba los dolores de una profunda crísis económica, política y social, que los analistas denominaron la crisis de la deuda. Decíase, que los sucesivos gobiernos mexicanos habían abusado del crédito internacional, habiéndose endeudado de manera harto irresponsable. En realidad, la raíz de esa situación se centraba en el derrumbe del precio internacional de petróleo, lo que desbalanceo e hizo tronar la estructura económica mexicana.

Veintisiete años después, los países del primer mundo afrontan una profunda crisis a la que, curiosamente, también se ha calificado de crisis de la deuda, arrastrando al mundo entero en un vertiginoso torbellino de desbarajuste sistémico. Parece que en esta segunda decada del siglo XXI, les ha llegado la hora de las medicinas amargas, dolorosas, pero necesarias a los países desarrollados, cuyas poblaciones habrán de soportar democráticamente -si se dejan- los ajustes y recortes presupuestarios en las áreas de educación, salud y cultura; medicina muy parecida a la que nos fue aplicada. Parafraseando un cantautor muy popular en aquellos tiempos, tan sólo nos queda expresar: ¡Qué cosas tiene la vida, Mariana, qué cosas tiene la vida! Cuanto más alto volamos, Mariana, nos duele más la caída.

Sin embargo. el trabajo de Daniel Guérin sigue siendo una referencia para quienes desean acercarse a la teoría y práctica anarquista por lo que recomendamos ampliamente su atenta lectura.

Chantal López y Omar Cortés

Indice de El anarquismo de Daniel Guérin	Nota editorial de Chantal López y Omar Cortés a la edición impresa	Prefacio de Daniel Guérin	Biblioteca Virtual Antorcha