Reflexiones sobre el movimiento revolucionario de México

CAPÍTULO CUARTO

México tiene condiciones peculiares que le diferencían tanto de la vieja Europa y aún de la mayor parte de América, que permiten concebir muy de otro modo al expuesto en el número anterior (Obviamente se refiere al número anterior de un periódico, puesto que este trabajo parece ser una recopilación de artículos periodísticos. Nota de Chantal López y Omar Cortés), la realización de una Revolución Social. Trátase de un territorio extensísimo (767 000 millas cuadradas), poco poblado, sólo unos quince millones de habitantes, abrupto y habitado principalmente por indígenas (indios), y mestizos con escasísimos medios de transporte y comunicación. El elemento extranjero es, en comparación al total de su población, insignificante y compuesto en su mayoría de burgueses, aspirantes a tales o capataces. Casi sin industria, poco explotada su inmensa riqueza minera, vive poco menos que de la agricultura que en ciertas regiones llega a dar dos cosechas al año. Se independizó de España a principios del próximo pasado siglo (Siglo XIX) y después de una serie de revueltas, pronunciamientos, revoluciones y hasta guerras con otras naciones, en las que perdió grandes extensiones de territorio, llegó a consolidarse lo que se llama un gobierno fuerte, de apariencias democráticas, que sofocó en sangre la exteriorización de todo movimiento radical, mientras iba despojando a los indios de sus tierras, que trabajaban en común, para venderlas a infames explotadores, generalmente a compañías extranjeras, alcanzando la tiranía y la explotación un apogeo extraordinario.

Los trabajadores eran ordinariamente tratados a latigazos, sin que se les diera a conocer ni lo que derecho es.¡Guay del que osara protestar de tanta iniquidad! La inmunda cárcel o el fusilamiento daban cuenta de él, sin que se enterara siquiera de ello el mundo llamado civilizado, ya que en México no podía existir periódico alguno que no se atuviera a los caprichos del tirano. Así, Porfirio Díaz, se sostuvo en el poder casi cuarenta años.

Tanta infamia y tiranía no podían durar más, y en un momento dado rebélase casi todo México. Quienes para sustituir unos gobernantes por otros, quienes por odio a la tiranía existente, quienes por aquello de a río revuelto, ganancia de pescadores, y quienes también por anhelos de emancipación completa, verdadera. Y como la República mexicana no dispone de un nutrido ejército regular, ni de una escuadra, y el país es a propósito para la guerra de guerrillas, no sólo por lo montañoso y abrupto de terreno, sino también por la dificultad de transportar tropas de un lugar a otro, en poco tiempo los rebeldes se hacen los amos de la situación, y el tirano tiene que abdicar y huir de México. Pero no por eso reina la paz. Leed cómo pinta la situación quien bien la conoce.